La llegada del otoño hace que la CALABAZA irrumpa con fuerza en nuestras cocinas y no solo porque se haga la protagonista de muchas fiestas de Halloween, también porque es en ésta época del año cuando está en temporada.
Si hay que destacar algunas propiedades interesantes de la calabaza habría que empezar por su poder antioxidante, gracias, fundamentalmente, a su alto contenido en carotenos (responsables también de darle esa característica tonalidad naranja) en licopeno y en vitamina C (por su riqueza en esta vitamina también es una buena aliada para plantar cara a los resfriados y fortalecer nuestras defensas). Los betacarotenos que contiene la calabaza también ayudan a proteger y cuidar la vista.
La calabaza está compuesta en gran parte por agua y su aporte calórico es realmente bajo. El número de calorías varía en función del tipo de calabaza, pero, para hacernos una idea, es importante señalar que en 100 gramos de una calabaza de las variedades más dulces puede haber entre 30-40 kcal aproximadamente.
Además, hay que realzar las propiedades depurativas de la calabaza, ya que es un alimento perfecto para ayudar a eliminar toxinas y depurar el organismo.
Su aporte de vitaminas y minerales también es para tenerlo en cuenta, ya que, además de la vitamina C que hemos comentado antes, las calabazas son ricas en vitamina a A, E y vitaminas del grupo B. También nos aportan una buena dosis de potasio, calcio, hierro y magnesio, entre otros minerales.
La calabaza es perfecta para combatir los problemas de estrñimiento gracias a su alto contenido en fibra y, si sueles tener problemas de ardores o de acidez, la calabaza también puede ayudarte a reducirlos.
Crema de Calabaza
INGREDIENTES:
– 200 g de setas variadas
– 2 cebollas grandes
– 50 ml de aceite de oliva
– 1 cucharada de aceite de oliva virgen
– 750 ml de caldo de verduras Biocop
– 200 ml de leche Monsoy Avena
– 1 cucharada de pipas de calabaza
– Unas ramitas de menta
– Pimienta
– Sal
ELABORACIÓN:
1. Pelar la calabaza y trocearla. Pelar y picar las cebollas; rehogarlas durante 5 minutos en una cacerola con la mitad del aceite caliente.
2. Incorporar la calabaza y saltear hasta que se dore ligeramente. Regar con el caldo y salpimentar al gusto. Cocer a fuego suave durante 15 minutos (o hasta que la calabaza esté cocida).
3. Retirar la parte terrosa de la setas y limpiarlas con un paño húmedo. Trocearlas y saltearlas en una sartén con el aceite restante. Salpimentar.Pasar la sopa de calabaza por la batidora y luego tamizar por el pasapurés.
4. Añadir la leche y remover bien. Tostar ligeramente las pipas de calabaza en una sartén sin grasa o en el horno. Calentar la crema y servirla con las setas y las pipas repartidas por encima. Rociar con unas gotas de aceite de oliva virgen y adornar con unas hojitas de menta.
Un plus: para suavizar la crema, puedes sustituir 1 cebolla por 1 manzana Golden;
INGREDIENTES: Risotto de Calabaza
-250 g de arroz Biográ
-400 g de calabaza
-1 cebolla
-1 diente de ajo
-1 limón
-1 cucharada de mantequilla
-100 g de queso parmesano rallado
-100 ml de aceite de girasol
-750 ml de caldo de verduras Biocop
-150 ml de vino blanco
-unas hojas de salvia fresca
ELABORACIÓN:
Paso 1. Pelar la calabaza y trocearla. Cocerla en una cacerola con agua hirviendo con sal de 15 a 20 minutos o hasta que esté hecha. Escurrirla muy bien. Mientras, freír las hojas de salvia en una sartén con el aceite caliente; escurrirlas sobre papel absorbente.
Paso 2. Pelar la cebolla y el diente de ajo y picarlos muy fino. Frotar con un cepillo la piel del limón bajo el chorro del agua fría. Secarlo, pelarlo y exprimirlo. Reservar su zumo y la piel por separado. Calentar 1 cucharada de aceite en una cacerola.
Paso 3. Rehogar la cebolla, el diente de ajo y la piel del limón sin que cojan color. Incorporar el arroz y saltearlo durante 4 minutos. Regar con el vino y, cuando rompa a hervir, añadir dos cucharones del caldo hirviendo y el zumo de limón. Retirar
la piel de limón. Volver a llevar a ebullición, a fuego medio, sin dejar de dar vueltas.
Paso 4. Cuando el arroz haya absorbido todo el caldo, añadir 1 cucharón más. Continuar del mismo modo hasta terminar con todo el caldo, removiendo frecuentemente. Salpimentar. Incorporar al risotto la mantequilla, la calabaza y el queso parmesano. Mezclar todo bien y servir adornado con las hojas de salvia.
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